Venezuela Digital 2020: Experiencia de medio chileno ElCiudadano.com apunta a aprovechar Facebook y Google para financiar y crear plataformas propias

«Tenemos que repensar el tema de comunicación porque no sacamos nada en ser expertos en posicionamiento SEO, nosotros debemos crear nuestros propios medios y redes sociales, y si estamos todos peleando por lo mismo debemos agruparnos y leer los medios que en realidad están con nosotros y saber identificarlos y filtrarlos”, expresó este lunes Leo Robles Belmar, periodista y director del medio digital ElCiudadano.com  de Chile.

Al participar en el Foro Venezuela Digital 2020, el periodista chileno dijo que era necesario aprovechar el sistema actual de “monetización” de las empresas Facebook y Google, de modo que se puedan usar esos métodos que ellos usan selectivamente para tratar de financiar medios digitales pequeños y alternativos, y más aún comenzar a crear plataformas propias y redes sociales que permitan sacudirse lo que llamó la «dictadura del algoritmo» que emplean los gigantes tecnológicos estadounidenses.

Explicó la experiencia propia que tuvo junto a otros estudiantes que se asociaron para fundar el periódico impreso El Ciudadano en el año 2005. Debido a su cobertura de las luchas por causas sociales del pueblo chileno, el tema del Cobre y las injusticias a los Mapuches, así como otros temas de injusticia internacional, el medio impreso y sus periodistas obtuvieron gran respaldo popular. Recibieron el Premio Unesco 2007 para fortalecer otros medios digitales colaborativos en Latinoamérica.

Comenzaron alianzas y convenios con medios internacionales como Xinhua, HispanTV, Sputnik, TeleSUR, Greyzone, entre otros, luego que el bloque de la llamada Sociedad Interamericana de Prensa, a la que calificó como esclava de la CIA y de EE.UU. los quería someter a los medios a transnacionales. “Las empresas mediáticas no le pagan a medios independientes”, al mencionar que en Chile hay un duopolio con dos grandes medios, El Mercurio y La Tercera.

Desde hace 15 años, en sus portadas impresas, y luego en digital, siempre apoyaron, por ejemplo, la Asamblea Constituyente (AC) en Chile, y entonces le decían que estaban locos. “Pero logramos masividad, imponernos, no digo que seamos los responsables de que finalmente se diera”, opinó sobre el plebiscito ganado por el pueblo para eliminar y sustituir la constitución de la dictadura de Augusto Pinochet.

Luego, con su incorporación al mundo digital, ElCiudadano.com se convierte en la tercera página más vista en idioma español en la red, con 5 millones de seguidores. Esto hizo que gente de Facebook los contactara para aprovechar el negocio del número de usuarios y visitas, que son dos de las variables que se imponen en el mundo digital. Al final, firmaron contrato con esta empresa en forma ingenua y sin saber de negocios. De un equipo de 5 personas pasaron a aumentar su personal a más de cien, y de la nada Facebook comenzó a pagarles por sus contenidos para vender publicidad, con lo cual obtenían hasta 100 mil dólares mensuales por concepto de visitas o reproducciones de videos.

“Fue una cosa que nos mareó un poco pero todo eso hizo que fuéramos conocidos”, dijo Robles. Esta posibilidad de financiamiento hizo posible que su empresa digital comenzara proyectos para ayudar a otros medios alternativos que no recibían financiamiento. Además, crearon una RedMedial, donde incorporan y suman los contenidos de medios de comunicación progresista, que permite publicar automáticamente los contenidos de ellos y ofrecer los temas tratados a sus usuarios.

Debido a la temática que difunden, del lado de los temas sociales de los pueblos, Facebook comenzó a sabotearlos. “El año pasado trabajamos mucho sobre el fraude de la OEA en Bolivia”, y a raíz de eso, cualquier contenido que ellos muestran es denunciado como infracción a las normas, así sea un video con ceremonias tribales que por ejemplo la BBC muestra usualmente sin que nadie se escandalice, pero en el caso de El Ciudadano se les acusaba de “pedofilia” o incentivar la «pornografía infantil».

“Desde hace 3 años tenemos 4.8 millones de seguidores, pero parece que esa cifra no se mueve”, dijo sobre su cuenta en Facebook, al denunciar que la empresa estadounidense les cambió al algoritmo para que siempre la cuenta y el sitio estén por debajo en las listas ofrecidas en los motores de búsqueda, independientemente de que mantienen las llamadas “labores de optimización de posicionamiento”.

“Nos quitaron el algoritmo, bajamos las visitas…En Google te dicen que te enseñan posicionamiento pero si el medio tiene una ideología, a ti te van a poner de último a pesar de que te pongas a trabajar en sus reglas para optimizar la búsqueda”.

“Tú dices, santa madre, hay que repensar esto. Debemos sacarnos esta especie de colonización que tenemos con estas plataformas. Pero tenemos que usar Facebook, Instagram, para luego transformarlo”, dijo, señalando que todo es válido en esta especie de guerra comunicacional.

Por ello, comentó que el proyecto de RedMedial que están trabajando permite saltar los fake news y lograr casi una agencia de noticias donde salen muchos medios de izquierda del mundo. De esta manera, a juicio de Robles, se aglutinan medios que forman parte de la lucha por la información veraz y cercana a los pueblos en un trabajo combinado.

“Nosotros lo que queremos hacer es seguir agregando medios, tenemos como 300 medios pero queremos mil a final de año y tenemos que seguir financiando. Cada persona que visita allí le da las visitas a cada medio y ganan dinero”.

“El pase a gol es lo que hacemos nosotros para financiar esos medios. Que los medios capitalicen esas visitas”, dijo con una metáfora futbolística, en su asistencia al resto del equipo comunicacional progresista del mundo.

Consideró que este proyecto permite construir plataformas paralelas para buscar noticias que visibilicen a los pueblos, por ejemplo el caso de la agresión al pueblo palestino, y que el usuario latinoamericano pueda ver medios amigos “que son a los que tenemos que dar las visitas, porque al final Google les pagará las visitas”.

“Lo más simpático para mí es que todo eso lo paga Facebook, Google, el enemigo para decirlo de alguna forma. Hagamos que lo paguen ellos”, expresó.