Lenín Moreno admite que ocultó datos tras cúmulo de fallecidos y abandono de cadáveres por coronavirus en Ecuador

Este jueves, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, quien en las últimas semanas solo se ha visto a través de las redes sociales, admitió en un mensaje a los ecuatorianos en cadena nacional que «se quedan cortos» los registros oficiales de contagiados y muertos por coronavirus, y  ordenó decir la verdad sobre las cifras reales, aunque sean «dolorosas».

«He dispuesto que se transparente la información por dolorosa que esta sea. Hay que decir la verdad. Sabemos que tanto el número de contagios, como de fallecimientos en los registros oficiales se quedan cortos. La realidad siempre supera el número de pruebas y la velocidad con la que se presta la atención», manifestó el mandatario, según cita RT.

Además, lanzó una alerta que ya expertos habían anunciado: «Creemos que serán entre 2.500 a 3.500 fallecidos por Covid-19 en estos meses», mencionó el mandatario. “No minimicen la gravedad de esta crisis… Es el momento de salvarnos todos”, agregó, aparentemente tratando de responsabilizar a los equipos de salud por las mentiras propaladas hasta ahora.

Un día antes, el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, en una intervención pública dijo: «nadie en este país está ocultando las cifras».

La pandemia del coronavirus ha golpeado fuertemente a Ecuador, especialmente en Guayaquil.  Según cifras del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias del Ecuador (SNGRE), hasta este 2 de abril, se habían registrado 3.163 contagiados por coronavirus y 120 muertos; aunque, desde este miércoles, en los comunicados aparece un nuevo dato: «fallecidos probables por Covid-19», que hasta la fecha son 78.

Pueblo abandonado:

Pero la aparición pública de Moreno se debe a las denuncias de los familiares y alcaldes que reclamaban el abandono de cientos de cadáveres de personas que morían por el virus y quedaban tirados en las calles, aceras y frente a hospitales, donde nunca los atendieron.

«Necesito que me ayuden, mis padres murieron ayer a las 10:00 de la mañana, miren cómo los tengo […] nosotros también estamos recaídos, nosotros también tenemos fiebre», dice una mujer en un video que grabaron en Guayaquil para llamar la atención de las autoridades.

Como esta mujer, otros también aprovechan las redes sociales para mandarle, con datos específicos, mensajes a las autoridades para informar sobre algún familiar muerto en su domicilio o en calles cercanas a su vivienda. Estas publicaciones se repiten constantemente en Twitter, principalmente.

El protocolo establecido por las autoridades es que los familiares de fallecidos en sus hogares deben comunicarse al ECU911. Sin embargo, algunos comentan que no han sido atendidos o que se tardan días para ir a retirar a los cadáveres, en una ciudad donde, en esta época del año, la temperatura oscila entre los 24 y 32 grados centígrados.

Las autoridades han informado que entre los muertos en sus domicilios hay personas con coronavirus, algunos con síntomas de problemas respiratorios y por otras causas.

En algunos videos, los familiares de fallecidos han denunciado que, pese a presentar síntomas de coronavirus, sus allegados no fueron atendidos en ningún centro hospitalario, ni se les hizo la prueba para diagnosticar si estaban infectados.

Personal de salud despedido y sin recursos

La situación también es grave para el personal de salud que, según información oficial, también se cuenta entre los contagiados.

Pero lo que ha indignado a los ecuatorianos, es que Moreno esté convocando a los médicos del país a sumarse como voluntarios para atender a los enfermos luego que despidiera a miles de ellos en el pasado reciente.

«¡Médicos de nuestros país! Hoy necesitamos de más profesionales comprometidos con salvar vidas. ¡Sé un voluntario más del 171!, con tus conocimientos llevarás salud, alivio, sanidad y paz a tus compatriotas. #QuédateEnCasa”, escribió Lenín Moreno.

El llamado se hace en medio de la pandemia, luego que en marzo del año pasado, dentro del “Plan de Prosperidad 2018-2021” y al “Plan de Optimización de la Función Ejecutiva”, ordenara el despido de más de 2.500 trabajadores del sector de la salud pública.

La Organización Sindical Única Nacional de Trabajadores del Ministerio de Salud Pública (Osuntramsa) reclamó esta conducta que consideró hipócrita, y a través de una carta pública pidió el reingreso de este personal despedido y la contratación de más trabajadores.