Estudio revela que el ejercicio funciona como medicina complementaria contra el cáncer
Un estudio presentado en la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Oncología Médica (ASCO) demostró que el ejercicio no solo mejora la calidad de vida de los pacientes con cáncer, sino que también incrementa su supervivencia. La investigación, conocida como ensayo Challenge y liderada por el Grupo Canadiense de Ensayos en Cáncer, evaluó durante 17 años a 889 pacientes con cáncer de colon en estadios II y III, y se mostró que la actividad física estructurada puede reducir el riesgo de deceso en un 37 %.
Los participantes que realizaron ejercicio aeróbico supervisado tres o cuatro veces por semana lograron una supervivencia global del 90 %, en comparación con el 83 % de quienes solo recibieron información sobre actividad física. “Nuestro estudio muestra que el ejercicio ya no es solo una intervención de calidad de vida, es un tratamiento para el cáncer de colon”, afirmó la coordinadora de la investigación, Kerry Courneya.
La aplicación de actividad física en el tratamiento oncológico requiere la integración de fisioterapeutas y kinesiólogos en los equipos médicos, quienes diseñen programas personalizados para cada paciente. Según los especialistas, el ejercicio potencia los efectos de la quimioterapia y se posiciona como una estrategia clave en la reducción de mortalidad.
Los hallazgos del estudio, publicados en la revista “New England Journal of Medicine”, refuerzan la necesidad de actualizar las guías clínicas para incluir la actividad física como una terapia complementaria. “Es un nivel de evidencia suficiente para modificar los protocolos médicos y considerar el ejercicio como medicina”, destacó el catedrático Mikel Izquierdo.
La investigación abre una nueva línea de tratamiento seguro y con mínimos efectos secundarios, lo que representa un avance significativo en la oncología. Para su implementación masiva, será clave la capacitación de profesionales y la creación de infraestructuras que permitan integrar el ejercicio en la atención médica oncológica.
Fuente: Medios Internacionales
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