Consumir mamón retarda el envejecimiento y posee propiedades depurativas

En el amplio mundo de las frutas tropicales, existe una pequeña joya que no siempre recibe la atención que merece: El mamón. También conocida como mamoncillo, limoncillo o quenepa, esta fruta de color verde y pulpa jugosa destaca no solo por su sabor dulce con un ligero toque ácido, sino por sus múltiples beneficios para la salud. Su origen se remonta a las regiones tropicales de América, donde forma parte de la dieta tradicional desde hace siglos.

Además de ser refrescante y deliciosa, el mamón es un alimento cargado de nutrientes esenciales. Su consumo frecuente puede ayudar a retrasar los signos del envejecimiento gracias a su alta concentración de antioxidantes naturales, los cuales combaten los radicales libres responsables del deterioro celular. Esto la convierte en una opción ideal para quienes buscan una dieta más saludable y preventiva. 

Esta fruta es rica en vitamina C, un nutriente esencial para fortalecer el sistema inmunológico y mantener una piel saludable. Esta vitamina, junto con los polifenoles presentes en la fruta, contribuye a la producción de colágeno y a la regeneración celular, lo que ayuda a mantener la piel firme y con un aspecto juvenil. También contiene hierro, que favorece la oxigenación de la sangre, y fósforo, importante para la salud ósea y cerebral.

Otra de sus grandes cualidades es su propiedad depurativa. Gracias a su alto contenido de fibra y agua, el mamón favorece el tránsito intestinal y ayuda al organismo a eliminar toxinas de manera natural. Consumirla con regularidad puede contribuir a mejorar la digestión y prevenir problemas como el estreñimiento, además de mantener una sensación de ligereza y bienestar.

También se ha estudiado que el mamón posee propiedades que pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre, lo que la convierte en una aliada para personas con resistencia a la insulina o que buscan prevenir enfermedades metabólicas. Sin embargo, como con cualquier alimento, su consumo debe ser moderado y complementarse con una dieta equilibrada.

Fuente: Medios internacional

VTV/YD/CP