Wall Street registra retroceso tecnológico y señales de debilidad económica en EE. UU.
Los principales índices bursátiles de Estados Unidos (EE. UU.) registran su peor desempeño en casi dos semanas, arrastrados por una nueva ola de ventas en el sector tecnológico y por el creciente nerviosismo ante la fragilidad económica del país norteamericano. La caída se produce en medio de un prolongado cierre gubernamental y señales contradictorias sobre el mercado laboral.
El índice Dow Jones baja 490 puntos y se ubica en 46 mil 820 unidades. El Standard & Poor’s 500 pierde 76 puntos y cae a seis mil 719, mientras que el Nasdaq retrocede 424 puntos y se sitúa en 23 mil 75.
Las acciones vinculadas a la inteligencia artificial lideran el retroceso. Microsoft cae 1,8 % y Nvidia 3 %, lo que afecta al índice de tecnología de la información. El índice de semiconductores también se ve golpeado, con una baja de 2,4 %. Qualcomm se desploma 4,9 % tras advertir sobre una posible pérdida de negocios con Samsung el próximo año.
DoorDash registra el peor desempeño del día, con una caída de 16,5 % tras presentar resultados trimestrales por debajo de las expectativas. Tapestry también decepciona, tras perder 10,7 % al proyectar débiles ganancias para la temporada navideña. Tesla retrocede 4,5 % en medio de tensiones internas por la votación de compensaciones para su CEO.
La incertidumbre sobre la política monetaria de la Reserva Federal se intensifica. El cierre más largo del Gobierno estadounidense en la historia obliga a los analistas a depender de datos privados, que muestran señales preocupantes. Una de las consultoras en EE. UU. Challenger, Gray & Christmas reportó un aumento de despidos en octubre, el más alto en 22 años. Revelio Labs indicó pérdida de empleos, mientras que la Fed de Chicago estima un alza en el desempleo a niveles no vistos en cuatro años.
El estratega Dennis Dick advierte que los mercados enfrentan múltiples focos de tensión: decisiones pendientes de la Fed, políticas arancelarias inciertas y un entorno institucional debilitado. Aunque reconoce que los últimos meses fueron positivos para Wall Street, considera que la corrección actual es inevitable.
La volatilidad se instala en los mercados estadounidenses, donde esto refleja una economía que pierde impulso y una clase empresarial que comienza a reconocer los límites del modelo especulativo. Las señales de desaceleración se acumulan, mientras el aparato financiero de EE. UU. muestra fisuras que podrían intensificarse en los próximos meses.
Fuente: Medios Internacionales
VTV/LM/DS/DB/

