Venezuela lamenta el fallecimiento de la activista argentina Alicia Jrapko
Tras luchar contra una cruel enfermedad por más de dos años, falleció la luchadora argentino-estadounidense, Alicia Jrapko quien en vida formara parte de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad.
La información la dio a conocer el ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, por medio de su cuenta en Twitter @VillegasPoljak, donde reseñó que “jamás se olvidará su solidaridad y amistad con Venezuela y la Revolución Bolivariana”.
Triste noticia la partida física de Alicia Jrapko, activista argentina residente en #EEUU, integrante de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad. Jamás se olvidará su solidaridad y amistad con #Venezuela y la Revolución Bolivariana. pic.twitter.com/0D0PToA9xl
— Ernesto Villegas Poljak (@VillegasPoljak) January 12, 2022
Hija de trabajadores, Jrapko asumió desde muy joven las luchas de una generación que soñaba construir una sociedad con justicia social en su natal Argentina.
Nacida el 1 de enero 1953 en Merlo, provincia Buenos Aires; creció y se educó en Córdoba, donde estudió Periodismo, pero la dictadura militar impuesta en 1976 desató una represión feroz hacia todos los militantes populares motivo por el cual Jrapko, quien por su activismo y militancia tuvo que salir al exilio ese mismo año.
Durante varios años vivió en México y luego se radicó en Estados Unidos, donde se comprometió con las luchas de los trabajadores y, a principios de los años 90 del pasado siglo, con el trabajo solidario con Cuba a través de IFCO-Pastores por La Paz, colaborando estrechamente con el reverendo Lucius Walker como su coordinadora de la costa Oeste.
Ayudó de esa forma a organizar y promover las becas para que los estudiantes afroamericanos y latinos pudieran asistir a la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) de forma gratuita para convertirse en médicos en sus comunidades.
Su labor solidaria la acercaba cada día más a Cuba; se convirtió en vocera de muchas caravanas de Pastores que recorrieron miles de kilómetros a través de Estados Unidos para contrarrestar las mentiras del Gobierno norteamericano contra la isla, mientras recolectaba ayuda humanitaria como símbolo de solidaridad con el pueblo de la nación caribeña.
Creó el capítulo estadounidense de la Red en Defensa de la Humanidad y fue miembro de su Secretaría General.
En su último proyecto, a pesar de estar enferma, fue copresidenta del Comité Nobel de la Brigada Médica Cubana Henry Reeve, como un esfuerzo más en su incansable lucha contra el criminal bloqueo a Cuba. LAV/CP