Telescopio Webb detecta SO2 en la atmósfera de un exoplaneta
Tres instrumentos del telescopio espacial James Webb detectaron monóxido y dióxido de carbono, agua, sodio y potasio en la capa gaseosa de WASP-39 b, un “saturno caliente” situado a 700 años luz, y lo más sorprendente: dióxido de azufre. Esta molécula se produce por reacciones fotoquímicas inducidas por la energética luz de la estrella madre, como ocurre en la capa de ozono de la Tierra.
Aunque en los últimos meses se han hecho famosas las impresionantes imágenes del cosmos captadas por el telescopio espacial James Webb (JWST), este gran observatorio de la NASA y la ESA acaba de obtener otra primicia: la huella química de la atmósfera de un exoplaneta, donde se encuentra por primera vez dióxido de azufre (SO2).
🛰️El @NASAWebb acaba de obtener la huella química de la atmósfera de un exoplaneta, donde se encuentra por primera vez dióxido de azufre (SO2)
La detección de este gas en la atmósfera de WASP-39 b supone la primera evidencia de fotoquímica en exoplanetashttps://t.co/6sdBFB2Xxf
— SINC (@agencia_sinc) November 22, 2022
El conjunto de instrumentos altamente sensibles del telescopio se enfocó en la atmósfera de un «saturno caliente», un planeta tan masivo como Saturno que orbita una estrella a unos 700 años luz de distancia, conocido como WASP-39 b.
Si bien el Webb y otros telescopios espaciales, incluidos el Hubble y el Spitzer, han revelado previamente compuestos aislados de la atmósfera de este planeta caliente, las nuevas lecturas brindan un menú completo de átomos, moléculas e incluso signos de química activa y de la presencia de nubes. Los nuevos datos también dan una pista de cómo se verían estas nubes de cerca: divididas en lugar de una capa única y uniforme sobre el planeta.
«Observamos el exoplaneta con múltiples instrumentos que, juntos, brindan una amplia franja del espectro infrarrojo y una panoplia de huellas dactilares químicas inaccesibles hasta el JWST», dijo la astrónoma de la Universidad de California en Santa Cruz (EE. UU.), Natalie Batalha, quien contribuyó y ayudó a coordinar la nueva investigación.
Una señal y reacción peculiares
“En los primeros datos vimos una señal muy peculiar en la atmósfera de este planeta, cuyo origen no logramos entender. Ahora, con este análisis, hemos podido inferir que se trataba de la huella que deja el dióxido de azufre producido por la alta radiación que el planeta recibe de su estrella en las capas altas de la atmósfera”, indicó el investigador posdoctoral del Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA), Jorge LilloBox, que ha participado en el estudio.
Según el investigador de la Universidad de Oxford en el Reino Unido y autor principal del artículo que explica el origen del dióxido de azufre en la atmósfera de WASP-39 b, Shang-Min Tsai, “esta es la primera vez que vemos evidencia concreta de fotoquímica (reacciones químicas iniciadas por luz estelar energética) en exoplanetas”.
VTV/CC/EMPG
Fuente: SINC