ESPECIAL | De Sabaneta al corazón del pueblo: 71 años del Comandante Eterno Hugo Chávez

Este lunes, 28 de julio de 2025, Venezuela conmemora con profundo sentimiento los 71 años del natalicio de Hugo Rafael Chávez Frías, el gigante llanero que transformó la historia de la patria. Más allá de su figura política, el pueblo recuerda al hombre, al soñador, al hijo de Sabaneta que, con su espíritu inquebrantable, se convirtió en la voz de los sin voz, en la esperanza de un pueblo que anhelaba justicia.  

Arañero de Sabaneta 

Nacido en una humilde casita de palma con pisos de tierra en Sabaneta de Barinas, en 1954, Hugo Chávez fue desde niño un alma vivaz, inteligente y alegre. Su infancia, marcada por el amor de su abuela «mamá Inés», lo conectó con la esencia de la tierra y fue de ella de quien aprendió a leer, escribir, y cosechar el maíz y las lechosas con las que hacían el popular «dulce de arañas», que luego vendía, y así forjó en su corazón la solidaridad y el trabajo desde temprana edad.

Aquel niño arañero, que soñaba con ser beisbolista profesional, jamás imaginó que el destino lo llevaría a un camino mucho más trascendente, el de la patria.

Soldado del pueblo

Aunque su ingreso a la Academia Militar de Venezuela en Caracas estuvo inicialmente motivado por el béisbol, el llamado de la patria resonó con fuerza en su espíritu. Allí, en la «Casa de los Sueños Azules», su pasión juvenil se reorientó hacia la defensa de su pueblo. De subteniente a comandante del Batallón de Paracaidistas, Chávez se forjó como un líder, un hombre íntegro que no toleraba las injusticias.

El 4 de febrero de 1992, en un acto de valentía y profundo amor por Venezuela, Chávez lideró una insurrección armada contra un gobierno que oprimía al pueblo con medidas neoliberales impuestas por el Fondo Monetario Internacional, las mismas que desataron la tragedia de El Caracazo.

Su célebre «Por ahora», pronunciado con la frente en alto, aunque significó un revés momentáneo, encendió una llama de esperanza en el corazón de millones de venezolanos, y que abrió las puertas a un futuro de dignidad y soberanía.

El Comandante Eterno

Tras dos años en la cárcel de Yare, su espíritu no se doblegó; al contrario, se fortaleció y el 6 de diciembre de 1998, el pueblo venezolano, cansado de décadas de bipartidismo, confió en él, al elegirlo por primera vez como presidente con un contundente 56.20% de los votos. Fue el inicio de la Revolución Bolivariana, un camino de profundas transformaciones sociales.

En abril de 2002, enfrentó un golpe de Estado mediático-empresarial, pero la fuerza de la unión cívico-militar lo rescató, demostrando el inquebrantable lazo entre el Comandante y su pueblo.

En 2004, con valentía democrática, se sometió a un referendo revocatorio, una figura incluida en la Constitución Bolivariana por su propia iniciativa, y salió fortalecido con el 59% de los votos. Una y otra vez, en 2006 y 2012, el pueblo lo reeligió, confiándole el destino de la nación.

Hugo Chávez no fue solo un líder, fue un compañero, un hermano, un padre que dedicó su vida a construir una Venezuela más justa, equitativa y soberana. Su visión de una Latinoamérica unida y libre resonó en cada rincón del continente.

Aunque partió físicamente el 5 de marzo de 2013, su legado es ilimitado y vive en cada logro social, en cada sonrisa de un niño, en cada corazón que late por la patria.

Hoy, a 71 años de su natalicio, su espíritu sigue como guía de las luchas emancipadoras de su pueblo. Hugo Chávez vive en la memoria, en la acción y en el amor de quienes creen en la construcción de un mundo mejor.

VTV/LAV/SB/CP