Revista Semana calificó de irresponsable a Duque al negarse a hablar con el presidente Maduro sobre el Covid-19
La revista colombiana Semana calificó de irresponsable al presidente Iván Duque al negarse a hablar con el jefe de Estado de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, para diseñar las estrategias necesarias para enfrentar la pandemia del Covid-19 en la frontera que une a ambas naciones, a fin de proteger a los pueblos que radican en la zona.
El manejo que el gobierno colombiano le ha dado a la crisis del coronavirus en la frontera con Venezuela ha sido desafortunado. En momentos de crisis se requiere una actitud diplomática y canales de comunicación entre los dos países para evitar afectaciones a la salud pública, destaca el trabajo publicado por este medio de información.
En el trabajo titulado «Es una irresponsabilidad no hablar con Venezuela en medio del coronavirus», la revista Semana señala que desde su fracaso hace algo más de un año, en el intento por tumbar a Maduro, la política de Duque frente al país vecino ha estado tan contaminada que hasta reconoció a Juan Guaidó, «pero recurrir a él para solucionar problemas apremiantes no solo es inútil, sino es hacer el oso», tal como sucedió en el caso del la solicitud de extradición de Aida Merlano.
Con una frontera de más de 2.000 kilometros y los múltiples problemas de orden público que existen en esta, se le suma la emergencia de salud que se está presentando por el coronavirus en esa zona, «no abrir un canal del comunicación con Venezuela es una irresponsabilidad».
No obstante, el mandatario venezolano le ha hecho innumerables llamados a Duque para atender esta situación de emergencia de manera conjunta, le propuso establecer relaciones consulares entre los dos países, pero el gobierno colombiano se negó, precisa.
Hay una pandemia mundial que según todos los estudios puede producir millones de muertos. Los estados fronterizos de Colombia y Venezuela son más vulnerables que el resto del territorio.
Con riesgos de esa dimensión, seguir con la estrategia de no contestarle el teléfono a ninguna autoridad del gobierno de Maduro es incomprensible.
El viernes pasado el canciller venezolano, Jorge Arreaza, en declaraciones a la W Radio, pedía dejar a un lado por ahora cualquier diferencia ideológica o política ante la emergencia humanitaria. Decía que había tenido que acudir a los medios de comunicación, porque no había encontrado un solo interlocutor oficial del gobierno colombiano.
La inflexibilidad de la política colombiana frente a Venezuela ha llevado a que los funcionarios venezolanos se vean más serios y responsables que los colombianos, mientras la gente se pregunta dónde está la canciller Claudia Blum, que desde que se posesionó no ha hecho prácticamente ninguna aparición pública, salvo para leer pequeños textos preparados por terceros.
Insta a la Ministra de Relaciones Exteriores a dar la cara y a fijar una posición frente al problema fronterizo. Una pandemia mundial requiere no solo un manejo médico y científico, sino también un manejo diplomático.
El presidente Duque tiene al frente una bomba de tiempo de la emergencia de salud que se está presentando en la frontera, «eso no es un error político sino una amenaza para la salud pública. Creer que esto se soluciona consultando a Guaidó o recurriendo a la Organización Panamericana de la Salud, es una ingenuidad», culmina la Revista Semana.