Presidente Maduro conmemora 66 años de la siembra del pintor y maestro de la luz, Armando Reverón
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, conmemoró este viernes los 66 años de la siembra del pintor y maestro de la luz, Armando Reverón.
A través de sus cuentas en las redes sociales, el Jefe de Estado rindió homenaje al genio de La Guaira quien logró revolucionar el mundo de las artes plásticas a través de su mágica creación.
Además, el Mandatario nacional puntualizó “Reverón es símbolo inmortal de nuestra identidad nacional”.
Conmemoramos 66 años de la siembra del pintor y maestro de la luz, Armando Reverón. Nuestro homenaje eterno al genio de La Guaira que logró revolucionar el mundo de las artes plásticas a través de su mágica creación. Reverón es símbolo inmortal de nuestra identidad nacional. pic.twitter.com/X9wDcW36UA
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) September 18, 2020
Armando Reverón
Su nombre completo era Armando Julio Reverón Montilla. Fue un pintor y artista plástico venezolano. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Caracas, en España y Francia. Se radicó en Macuto, en La Guaira, a partir de 1921, donde realiza gran parte de su obra, en la que capta y transmite el impacto de la luz tropical. Es considerado el mejor pintor de Venezuela del siglo XX, se interesó profundamente por la acción de la luz sobre las formas. Entusiasta del impresionismo francés, su pintura evolucionó a la abstracción y el simbolismo. Los temas preferidos fueron el paisaje y el desnudo femenino.
Reverón nació en Caracas el 10 de mayo de 1889, durante su infancia estudió en Valencia, tiempo en el que orientado por su mentor y tío abuelo materno, Ricardo Montilla, aprendió el dibujo del natural, afición que despertó su vocación artística, hasta que en 1908 ingresó a la Academia de Bellas Artes, en Caracas, para luego viajar a España e ingresar a la Escuela de Bellas Artes de Barcelona y la Academia de San Fernando, en Madrid.
Posteriormente, vivió en París, Francia, donde fue influenciado por la tendencia del impresionismo en la pintura hasta que regresó a Venezuela en 1915 y se incorporó al Círculo de Bellas Artes, sin embargo, luego de entablar amistad con el pintor ruso Nicolás Fernandinov, otra figura determinante en su vida, quien le motiva a construir El Castillete, en Macuto, para dedicarse a la creación artística, lejos de los rigores académicos y donde conoce a Juanita Ríos, su compañera de vida.
El Castillete sería en adelante su taller, obra construida con el tiempo e inmersión cada vez más profunda del artista en su proceso creativo, cuya edificación llevó dos décadas y fue caracterizada por el sincretismo de los objetos que fue creando en conjunto con la arquitectura de piedra del lugar.
En dicho espacio guardó pinturas, pinceles, lienzos, muñecas de trapo, hilos de alambre, vestuarios e instrumentos musicales de utilería y estructuras de bambú a las que les daba significado al espacio estético.
Falleció el 18 de septiembre de 1954 en Caracas.
Fuente: Agencias.