¿Es posible aumentar rendimiento agrícola y a la vez proteger la biodiversidad?
Cada vez está más claro que un incremento de los tamaños de los campos agrícolas y una reducción de la diversidad de cultivos, prácticas relacionadas con la intensificación de la agricultura, tienen un efecto negativo en la biodiversidad. ¿No hay, pues, un modo de conciliar agricultura y biodiversidad?. En una investigación reciente, se ha buscado la respuesta a esta pregunta.
Un equipo científico liderado por el BC3 (Basque Centre for Climate Change) y con participación de la Estación Biológica de Doñana del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en España, ha analizado un conjunto de datos únicos, resultado de la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE).
En este sentido, el Ministerio de Agricultura de España, incluye el seguimiento anual de 12.300 parcelas permanentes de 25 hectáreas, ubicadas en distintos puntos de España. Los datos analizados son los que comprenden del año 2001 a 2019.
“A pesar de que la conservación de la biodiversidad y la productividad de los cultivos, parecen incompatibles, los paisajes agrícolas representan oportunidades importantes para la conservación de la biodiversidad fuera de las áreas protegidas tradicionales”, explica Ainhoa Magrach, investigadora del BC3.
El equipo ha demostrado que existen posibles estrategias sinérgicas que son buenas tanto para la conservación de la biodiversidad como para el aumento del rendimiento de los cultivos.
VTV/CC/LL
Fuente: NCYT