Conoce los mitos y realidades sobre implantes mamarios
«Los implantes que más se utilizan actualmente son aquellos que están fabricados a base de silicona, porque tienen más durabilidad en el tiempo, no producen reacciones locales, ni sistemáticas, en su mayoría cuentan con mejor llenado. Actualmente, no existe ningún protocolo que indique que el implante deba cambiarse cada 10 años», refirió la médico cirujano María Bastidas, durante su participación en el programa Buena Vibra, que transmite Venezolana de Televisión.
Las aseveraciones fueron dadas por la especialista al afirmar algunas realidades y mitos sobre el uso de implantes mamarios. La doctora María Bastidas señaló que uno de los mitos a romper es que éstos deben ser sustituidos después de cierto tiempo, «la única manera que se puedan cambiar es porque la paciente observe cierta caída, algún cambio en la forma, por contractura capsular, dolor o porque se sospeche ruptura de implante».
Precisó que los implantes mamarios se colocan detrás del músculo, por lo que la glándula mamaria queda por encima y es que, «independientemente de la técnica que se aplique, el tejido mamario siempre quedará libre, es así como la mujer puede dar pecho sin ningún problema. Lo que si no es recomendable es colocar el implante cuando la paciente esta amamantando, ya que no debe haber producción de leche».
A su juicio, uno de los criterios para escoger el volumen del implante es el tamaño del tórax y estatura de la paciente y es que «todo es cuestión de simetría, que se vea bien. Otro punto a considerar es la edad de la paciente, lo recomendable es que la misma haya alcanzado su desarrollo como mujer, es decir, a partir de los 18 años. Antes de operar cada paciente debe tener exámenes completos como: mamografías, eco mamario, lo que nos debería dar una idea global de que la paciente esta sana».
Los implantes mamarios son “dispositivos médicos inventados para mejorar la forma de la mama o para crear un volumen mamario ausente o distorsionado por diferentes causas”.
Los implantes varían según su forma, superficie y material de relleno por lo que pueden ser:
Por la forma: Se pueden diferenciar entre implantes redondos y anatómicos o en forma de lágrima. Bernabéu aclara que “la diferencia entre los implantes redondos y anatómicos es la forma que confieren a la mama, produciendo estos últimos un aspecto más natural con relleno, sobre todo del polo inferior”.
Por la superficie: Pueden ser lisos o rugosos, (texturizados). Estos últimos se adhieren al tejido periprotésico (cápsula), que impide su movilidad.
Por el material de relleno: Los implantes mamarios se dividen en suero fisiológico y silicona, (actualmente gel cohesivo). Ambos cuentan con una cubierta externa de silicona.
VTV/EL/EMPG
