Médicos en Brasil avanzan en estudios para terapias celulares contra el cáncer
En Brasil, se avanza en los estudios de las terapias celulares contra las leucemias (CAR-T), con la recuperación del paciente Paulo Peregrino, de 61 años, que se sometió a tratamiento en la sanidad pública. Peregrino tenía manchas oscuras de un linfoma en estado avanzado, después del procedimiento médico, su organismo quedó libre de células cancerosas.
Paulo forma parte de un grupo de 14 pacientes tratados desde 2019 en los estudios experimentales con CAR-T, que realiza con fondos públicos la Fundación Hemocentro de la Universidad de Sao Paulo, en colaboración con otras instituciones públicas.
El doctor Vanderson Rocha, quien trató a Peregrino, explicó que de los 14 pacientes, la gran mayoría presentó una remisión de los tumores completa o muy importante y sólo dos fallecieron, unos números “similares” a los de otros lugares donde se aplica esta terapia, como Estados Unidos y Europa.
Por su parte, el director de Hemocentro, Dimas Covas, dijo que el tratamiento de cáncer se desarrolló de forma integral en el país suramericano, sin vínculos con las patentes ni procesos comerciales en otros países.
Covas indicó que el próximo paso se dará en el segundo semestre de este año, cuando se ponga en marcha un estudio clínico más amplio, con más de 60 pacientes, para obtener el registro sanitario de la terapia, algo que alcanzará previsiblemente en el plazo de un año.
Los investigadores señalan que la terapia de momento sólo es efectiva para leucemias y linfomas de células B, por lo que no es útil para cualquier tipo de cáncer, y sólo se recomienda en casos en los que han fracasado las terapias tradicionales, como la quimioterapia y los trasplantes de médula.
El tratamiento celular tiene un costo elevado, de unos 2 millones de reales (unos 406.000 dólares), aunque pacientes como Paulo Peregrino no pagó nada por tratarse de un programa público.
La técnica comprende modificar en el laboratorio las células de defensa del paciente, los linfocitos, para que aprendan a eliminar la enfermedad, y después, se inyecta el cóctel de linfocitos en el organismo mediante una transfusión.
Fuente: Medios internacionales
VTV/JR /CP