Laudo Arbitral de París fue impuesto a Venezuela en un momento de máxima debilidad
En el Acto de Unión Nacional en Defensa de la Guayana Esequiba, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, señaló que, “el Laudo Arbitral de París de 1899, fue impuesto a Venezuela en un momento de máxima debilidad. Un ejemplo es que, el día en que fue anunciado el Laudo, barcos de guerra norteamericanos y británicos se anunciaron sin invitación en los puertos venezolanos”.
El jefe de Estado recordó que esta fue una de las lecciones más amargas de esta historia, en que las divisiones entre venezolanos, las guerras civiles, el canibalismo político y el entreguismo a los intereses extranjeros, fueron aprovechados por las potencias dominantes con el fin de despojarnos del territorio, con impunidad.
El territorio de Venezuela lo han mancillado y robado los imperios, “cuando hemos estado divididos, desunidos, débiles, enfrentados entre nosotros, por eso es la importancia de revitalizar el espíritu de unión nacional», recalcó el presidente Maduro, desde la sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño, en Caracas, donde se realizó el acto.
Continuó con su exposición y explicó que, “en los años siguientes al Laudo de París, compañías estadounidenses, francesas y alemanas, financiaron un movimiento insurreccional para derrocar al presidente Cipriano Castro. A los pocos meses, el Reino Unido, Alemania e Italia, bloquearon los puertos venezolanos, bombardearon aduanas y cuarteles, y hundieron diez barcos de la marina de guerra venezolana”.
El objetivo claro de estas acciones, prosiguió el presidente, era acorralar a nuestro país: destruirlo y saquearlo.
En 1905, el presidente de Estados Unidos, Teodoro Roosevelt, ordenó la preparación de un plan de invasión militar a Venezuela, con la intención de tomar los puertos principales del país, así como la ciudad capital, Caracas. Ese fue el mismo año en que se forzó a Venezuela a aplicar el Laudo fraudulento mediante el establecimiento de hitos fronterizos. La frontera de facto se impuso en medio de la diplomacia de las cañoneras.
Documentos secretos divulgados por el profesor e historiador, Samuel Moncada, ponen al descubierto los planes de invasión que se tenían, por La Guaira, para tomar la capital.
Sin embargo, explicó el jefe del Ejecutivo que, “las décadas siguientes fueron las más violentas de la historia de la humanidad. Dos guerras mundiales y numerosas invasiones coloniales con decenas de millones de muertos cerraron toda posibilidad institucional para que Venezuela denunciara el despojo cometido contra su territorio. Los venezolanos no aceptaban el Laudo, pero la situación mundial no ofrecía posibilidades para recuperar el territorio usurpado por el poder militar imperial”.
Al finalizar de la Segunda Guerra Mundial, el mundo cambió: “Nuevas fuerzas, nuevas ideas y nuevas instituciones abrirían posibilidades para que los países del Sur denunciaran los tratados desiguales impuestos por las potencias imperiales en el siglo XIX”, sostuvo.
Cabe destacar que, a partir de 1945, los imperios europeos comenzaron a desmoronarse y pierden la capacidad de imponer sus intereses por la vía militar. Decenas de países reclaman el fin de los imperios y su independencia nacional. Es el gran proceso de la descolonización que se lleva a cabo.
Indicó el jefe de Estado que, es por ello que, “surgen nuevas instituciones como las Naciones Unidas, para impedir el regreso de la Guerra Mundial y el uso de la fuerza como vía legal para dominar a países independientes. La soberanía nacional, la autodeterminación de los pueblos y la igualdad jurídica de los Estados, surgen como principios aceptados ahora por la mayoría del mundo”.
Aclaró que, en este contexto, el Gobierno de Venezuela, en los años 60, encuentra una opinión mundial y una estructura jurídica internacional como la ONU, que permite denunciar la agresión colonialista del Reino Unido en 1899.
En los años 60, el Reino Unido se propuso permitir la independencia de su colonia en la Guyana Británica y también deshacerse de la memoria del despojo territorial cometido contra Venezuela. La circunstancia era propicia para que la nación denunciara el fraude de 1899, y exigiera al Reino Unido la restitución de sus derechos territoriales sobre la Guayana Esequiba.
Finalmente, este tercer momento histórico, explicó el presidente Nicolás Maduro, culmina entre 1962 y 1966, desde que los expertos venezolanos entregaron al gobierno británico un caudal de documentos históricos que probaban la injusticia cometida contra Venezuela en 1899, que ya en 1949, uno de los miembros del equipo de abogados de Venezuela, denunció la componenda entre los jueces del tribunal que decidió despojar a Venezuela de su territorio.
#EnVivo 📹 | «Es con la firma del Acuerdo de Ginebra, el 17 de febrero de 1966, que el Reino de la Gran Bretaña acepta la controversia que Venezuela venía planteando durante todo el siglo XX, deja de lado el laudo arbitral de París», explicó el jefe de Estado @NicolasMaduro pic.twitter.com/NxFeyVQEZh
— Prensa Presidencial (@PresidencialVen) November 7, 2023
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