Israel continúa hostigamiento en Cisjordania y expulsa a agricultores de sus tierras

Una nueva incursión del Ejército israelí en la Cisjordania ocupada dejó este viernes a varios palestinos afectados por inhalación de gas lacrimógeno mientras trabajaban en sus campos, después de que soldados dispararon botes de gas en la aldea de al-Rashayda, al este de Belén.

Al respecto, el presidente del consejo local, Jumaa Rashayda, informó que por tercer día consecutivo las tropas israelíes irrumpieron en la zona de Wadi Ayash, donde los agricultores realizaban sus labores. Explicó que los soldados emplearon munición real, gases lacrimógenos y granadas aturdidoras, lo que provocó que varias personas sufrieran síntomas de asfixia.

El líder comunitario añadió que los militares obligaron a los campesinos a retirarse de las parcelas e incautaron dos tractores. Recordó que un día antes un grupo de colonos y las fuerzas de ocupación atacaron a residentes que araban sus terrenos en el mismo sector, lo que dejó a un joven herido de bala en el pie.

Rashayda subrayó que estos incidentes forman parte de una campaña de hostigamiento constante destinada a expulsar a los agricultores palestinos y avanzar sobre las tierras agrícolas situadas al este de Belén.

Por su parte, la Comisión de Resistencia al Muro y a los Asentamientos (CRCM) alertó que la violencia de colonos y militares en Cisjordania alcanzó niveles sin precedentes, con dos mil 350 ataques registrados solo en el mes de octubre.

Los episodios se concentraron en Ramala, Nablus y Hebrón, donde más de 15.000 árboles fueron destruidos desde ese mes, con el objetivo de facilitar la expansión de asentamientos ilegales. En paralelo, Israel aprobó la licitación de cinco mil 667 nuevas unidades de vivienda en colonias, un aumento del 48 % respecto al récord anterior. Estos asentamientos son considerados ilegales por las Naciones Unidas y la comunidad internacional.

Fuente: Telesur. 

VTV/GC/CP