Investigadores andaluces y rusos buscan alternativas a la industria del dolor
Un equipo de la Universidad de Jaén junto a la Academia de Ciencias Rusas elabora protocolos para lidiar con el dolor sin fármacos. Proponen prácticas adaptadas al perfil psicológico de los pacientes para desprenderse del tratamiento con opiáceos que no para de crecer y de generar mayores problemas y adicciones a nivel global.
¿El dolor es igual para todo el mundo?, ¿se puede vivir con dolor?, ¿hay que evitarlo a toda costa? Estas preguntas rondan a la comunidad científica desde siempre, pero las respuestas son más acuciantes desde que las sociedades desarrolladas ven como los remedios al dolor se han convertido en un problema mucho mayor.
La crisis de los opioides de Estados Unidos es el final de un viaje que nadie quiere hacer. Dolores de muelas que son tratados con opioides. Moscas a cañonazos. No hay caries, pero sí adictos y, por lo tanto, un gran negocio.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estadounidenses, casi medio millón de personas murieron por sobredosis relacionada con sustancias opioides, tanto ilegales como recetadas de 2009 a 2019. CC /CP