El dinosaurio, bautizado como Parrosaurus Missouriensis —pues el histórico descubrimiento tuvo lugar en el estado de Misuri— era herbívoro y medía en torno a los 11 metros de largo. También tenía una boca similar al pico de un pato con aproximadamente 1.000 dientes pequeños.
Los primeros huesos del dinosaurio habían sido descubiertos en la zona en la década de 1940, por los dueños originales de la propiedad. En ese entonces, los enviaron al Museo Nacional Smithsonian de Historia Natural, pero solo ahora se logró recolectar suficientes restos óseos como para asegurarse de que se trata de un nuevo género y especie.
Al descubrir el esqueleto del dinosaurio, los mismos fueron enviados al Centro de Aprendizaje del Museo Sainte Genevieve, donde se va a exhibir hasta el 11 de diciembre.
En este sentido, el destacado paleontólogo Pete Makovicky, del Museo Field de Historia Natural, en Chicago indicó que podría haber más dinosaurios de esta especie en la zona por lo que «en realidad, estamos observando algo que podría ser una ocurrencia de muerte masiva, como una manada entera de dinosaurios de distintas edades que perecieron y quedaron enterrados juntos», refiere el portal Sputnik.