Nayib Bukele autoriza a tropas militares uso de “fuerza letal” contra pandillas de El Salvador en plena pandemia
El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, autorizó a las tropas militares utilizar “la fuerza letal” para enfrentarse contra los pandilleros callejeros.
“La policía y la Fuerza Armada deberán priorizar el resguardo de sus vidas, de sus compañeros y de los ciudadanos honrados. El uso de la fuerza letal está autorizado para defensa propia o para la defensa de la vida de los salvadoreños”, manifestó Bukele, en mensaje publicado este lunes en su cuenta oficial en las redes sociales.
Señaló que “las Naras están aprovechando que casi la totalidad de la fuerza pública está controlando la pandemia. Tendremos que mover recursos para combatirlos”, escribió, según reseña de HispanTV.
El Mandatario también instruyó que los miembros de la Policía y del Ejército den prioridad a atender la escalada de homicidios en medio de la pandemia de la Covid-19, lo que supone un duro golpe a la estrategia de contención con la vigilancia de los uniformados en la calle.
La nueva orden de Bukele tiene lugar después de que unas 23 personas fueron asesinadas el pasado viernes en las cárceles de El Salvador, de las que se acusa a las pandillas, conocidas también como “Maras”.
El Salvador es considerado uno de los países más violentos del mundo por las tasas de homicidios por cada 100.000 habitantes es de entre 103 y 50,3 registradas entre 2015 y 2018, índices atribuidos principalmente a las pandillas Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18.
Pandillas forman “sociedad paralela” en Centroamérica
Bukele, en el poco tiempo que tiene como mandatario nacional, ha ordenado acciones que violan acuerdos internacionales de derechos humanos, apoyándose cada vez más en militarización y uso de la fuerza letal. Recientemente, para combatir la pandemia del coronavirus, ordenó el cierre total de un municipio para controlar los niveles de contagio, prohibiendo que los pobladores salieran incluso para satisfacer necesidades de alimentación, salud y tratamientos médicos. Organizaciones de DD.HH. protestaron sin resultado alguno.
Ahora, el gobierno de Bukele aprovecha la situación epidemiológica para presionar a los pandilleros. Decidió el domingo mezclar a miembros de pandillas rivales en celdas comunes en un intento por cortar la comunicación entre sus integrantes. Además, ordenó el viernes el confinamiento de todos los pandilleros, enviar a los cabecillas a encierro solitario y suspender todas las actividades en las prisiones.
Las organizaciones sociales y de DD.HH. han denunciado que las cárceles salvadoreñas son fuentes de contagio, los reclusos no son atendidos con las medidas de protección necesarias, ni el gobierno ofrece programas de reeducación ni atención integral.
Durante el fin de semana, las autoridades realizaron requisas en al menos cinco prisiones. En todo el sistema de cárceles están recluidos unos 12 mil 862 “pandilleros”, informó la Dirección de Centros Penales del país centroamericano.
