Homicidios en Ecuador se disparan desde la llegada de Noboa

Hasta el pasado domingo, Ecuador contabilizó un total de 15 mil 561 asesinados desde el 23 de noviembre de 2023, fecha en la cual el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, asumió el poder. Esta cifra «revela una realidad: la estrategia de seguridad, marcada por estados de excepción y la militarización, no ha logrado contener la violencia criminal». Durante este período, se cometió un promedio de 22 asesinatos por día en el territorio ecuatoriano.

Con el incremento que se registró en marzo de 2024, el año pasado cerró con una tasa de 38,8 fallecimientos violentos por cada 100 mil habitantes, una reducción frente al récord histórico de 47,25 registrados en 2023, lo que fue destacado por el gobierno de Noboa. 

Posteriormente, entre enero y octubre del presente año se registraron 7 mil 553 homicidios, lo que arroja un promedio de 25 asesinatos diarios. Si esta tendencia se mantiene en el cierre del año, Ecuador alcanzaría las 9 mil 69 decesos y una tasa de 50,01 homicidios por cada 100 mil habitantes.  Este escenario convertiría al 2025 en el año más sangriento de la historia nacional y posicionaría a Ecuador como el país más violento de Latinoamérica, una región que ya es considerada la más insegura del mundo.

Al analizar la distribución por provincias, Guayas encabeza la lista con 7 mil 109 homicidios, lo que representa el 45,7% del total de crímenes cometidos durante los últimos dos años. Le sigue Manabí, que registra 2 mil 59 víctimas; aunque la diferencia es notable frente al primer lugar, esta provincia concentra el 13,2% de los casos a escala nacional.

En cuanto al género de las víctimas, la guerra narcodelictiva golpea mayoritariamente a los hombres. Las estadísticas muestran que 14 mil 253 varones fueron asesinados, para abarcar el 91,6% de la totalidad de los homicidios en este período. Las mujeres representan el 7,9% de las muertes, con mil 231 casos.

Además, se evidencia que el grupo etario más afectado es el que constituyen los adultos jóvenes de entre 25 y 34 años, con 5 mil 482 víctimas, lo que constituye el 35,2% del total de asesinatos. El segundo segmento es el de 18 a 24 años, con 3 mil 452 crímenes, que representan el 22,2%. También 940 menores de edad fueron asesinados durante este periodo. El grupo de adolescentes de 12 a 17 años es el más golpeado en este segmento vulnerable, con 853 víctimas. También se cometieron 87 crímenes contra niños de menos de 11 años.

Finalmente, las motivaciones detrás de estas muertes apuntan a la violencia selectiva y la disputa de mercados ilegales. La categoría clasificada como amenaza, que suele vincularse a muertes por encargo o advertencias previas, lidera los registros con 9 mil 32 casos, para abarcar el 60% de los homicidios. 

Fuente: Primicias

VTV/DC/CP