Consejo de Seguridad de la ONU celebra una reunión de emergencia sobre Gaza
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebró este martes una reunión de emergencia sobre Gaza, convocada a petición de Israel con el apoyo de Estados Unidos, Reino Unido y Francia, para debatir la situación de los prisioneros israelíes en el enclave.
Como parte del debate, el subsecretario general de la ONU para Europa, Asia Central y las Américas, general Miroslav Jenča pidió la liberación inmediata de los prisioneros y denunció la violencia constante en Gaza, incluyendo asesinatos de civiles que buscan alimentos.
Advirtió que impedir el acceso a ayuda humanitaria constituye crimen de guerra y pidió al Estado sionista facilitar sin trabas el ingreso de suministros vitales. Jenča describió la decisión de Netanyahu de expandir la guerra a toda la Franja de Gaza como «profundamente preocupante» y «que podría poner en peligro la vida de los prisioneros palestinos e israelíes».
Por otra parte, la embajadora de Estados Unidos, Dorothy Shea, reafirmó el apoyo total de Washington a «Israel», pidió presionar a Hamás y rechazó las acusaciones de genocidio. También negó muertes cerca de centros humanitarios y destacó la entrega de más de cinco millones de comidas en Gaza.
Ver esta publicación en Instagram
Asimismo, el representante adjunto de Rusia ante las Naciones Unidas. Dmitry Polyansky, denunció que miles de camiones con ayuda esperan permiso israelí para entrar en Gaza mientras la población sufre hambre. Acusó a la ocupación de buscar ocupar el enclave y criticó a la Knéset por aprobar leyes de demolición y asentamientos.
Francia, por su parte, exigió abrir todos los cruces fronterizos para atender la hambruna, aunque también pidió la liberación de prisioneros y atacó al movimiento de resistencia palestina. La representante de Reino Unido, Dame Barbara Woodward, condenó la prohibición de leche para niños en Gaza y reclamó un alto el fuego inmediato, ofreciendo cooperación para una solución permanente.
El representante adjunto de China y el de Pakistán exigieron un alto el fuego permanente y denunciaron las masacres contra palestinos, mientras que el argelino Amar Benjamaa acusó a «Israel» de violar el alto el fuego y advirtió que la injusticia “no puede convertirse en la norma”, instando al Consejo a actuar sin dobles raseros.
En vísperas de la sesión, Hamás instó a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU a «presionar a la ocupación para que ponga fin a la tragedia humanitaria en la Franja de Gaza, de conformidad con el derecho internacional humanitario, que responsabiliza a la potencia ocupante de proporcionar a la población los recursos necesarios y de poner fin a la política de hambruna masiva, que constituye un crimen de guerra».
Hamás también instó al Consejo de Seguridad a emitir «resoluciones claras y vinculantes sobre la ocupación para poner fin a su guerra de exterminio, que incluye masacres, violaciones, hambruna y la destrucción de la vida civil en la Franja de Gaza».
Responsabilizó plenamente al gobierno de Netanyahu por la vida de todos los presos retenidos por la resistencia, y añadió que el primer ministro es responsable de la condición del soldado cautivo Eviatar David debido a la escalada del asedio, la hambruna y la negación de alimentos, agua y medicamentos.
El pasado 7 de octubre de 2023 las Brigadas Al-Qassam, ala militar del movimiento Hamás, anunciaron el inicio de la Operación “Diluvio de Al Aqsa”. Después de esa epopeya se desató sobre Gaza y toda Palestina un feroz genocidio que movilizó los frentes de Resistencia de la región y colocó la causa de la liberación de la tierra árabe en el escenario mundial.
Fuente: Al Mayadeen
VTV/DR/CP