Científicos identifican causa de la inflamación crónica en la endometriosis

La endometriosis afecta a más de 200 millones de personas en todo el mundo, pero su diagnóstico aun es difícil y sus mecanismos poco claros. Esta enfermedad crónica se caracteriza por el crecimiento de tejido similar al endometrio fuera del útero,  lo que genera dolor, inflamación y, en muchos casos, infertilidad.

A pesar de su alta prevalencia, la endometriosis se mantiene como una condición subestimada y frecuentemente mal diagnosticada. Muchas pacientes tardan entre siete y 10 años en recibir un diagnóstico certero, y los tratamientos actuales se basan en hormonas o cirugía, opciones que no son efectivas o adecuadas para todos los casos.

«La endometriosis comienza para la mayoría de las niñas en la adolescencia, cuando comienzan a tener sus períodos», dijo el coautor del estudio, Asgerally Fazleabas, profesor y presidente asociado de investigación del Departamento de Obstetricia, Ginecología y Biología Reproductiva de la Facultad de Medicina Humana de la Universidad Estatal de Michigan. Analizan el tejido en su contexto original. «Muchas de estas chicas tienen períodos complicados con un dolor pélvico muy severo que dura toda su adolescencia. Afecta gran parte de su vida normal», añadió.

Analizan el tejido en su contexto original

La investigación publicada en una revista de ciencia utilizó transcriptómica espacial para examinar las lesiones endometriósicas a nivel celular y molecular. A diferencia de métodos tradicionales que analizan tejidos disgregados, esta tecnología permite estudiar cómo se comportan las células dentro de su entorno natural.

El estudio se centró en lesiones superficiales del peritoneo y comparó muestras de cinco pacientes con endometriosis, al utilizar tejido lesionado y endometrio eutópico (normal) de las mismas personas. Se estudiaron específicamente tres tipos celulares: epitelio, estroma y macrófagos, lo que permitió identificar cambios específicos en cada población celular.

El epitelio de las lesiones mostró una activación significativa de genes relacionados con la respuesta inmunitaria. Se encontró sobreexpresión de componentes del sistema del complemento como C3, así como moléculas de MHC clase II, CD74 y otras asociadas con inflamación crónica.

Estos resultados sugieren que el epitelio no solo es un tejido pasivo, sino que participa activamente en la perpetuación de la inflamación. Esta activación puede contribuir a la persistencia de las lesiones y a la resistencia frente a los tratamientos actuales.

Fuente: Medios digitales

VTV/DR/DS