China realiza gran desfile militar en conmemoración a la Victoria Antifascista
China celebró el 80.º aniversario de la victoria en la Guerra de Resistencia contra la Agresión Japonesa y la Segunda Guerra Mundial Antifascista con un desfile militar de gran escala en la Plaza de Tiananmén, en Beijing, la jornada incluyó la participación de más de 20 líderes mundiales y se convirtió en la mayor exhibición militar realizada en el país hasta la fecha.
La ceremonia comenzó con el izamiento de la bandera nacional y la interpretación del himno, seguido por el discurso inaugural del presidente de la República Popular China, Xi Jinping. “La historia lleva el legado del pasado y también inspira al futuro”, expresó el mandatario desde el centro histórico de la capital. En su intervención, destacó el compromiso del pueblo chino con la defensa de su soberanía y rechazó las presiones externas.
Xi Jinping pasó revista a las tropas, que rindieron homenaje con muestras de respeto y disciplina. El desfile incluyó más de 45 contingentes militares, más de 100 sistemas de armas, y una banda integrada por mil músicos del Ejército Popular de Liberación, distribuidos en 14 filas que representaron cada año de resistencia desde 1931.
En el cielo de Pekín, escuadrones aéreos desplegaron maniobras sincronizadas que exhibieron el poder tecnológico del país. Entre los equipos presentados destacaron armas hipersónicas, drones, cazas de última generación, sistemas de interferencia electrónica, unidades de guerra cibernética y armamento estratégico terrestre, marítimo y aéreo.
Los asistentes ocuparon sillas de colores verde, rojo y oro, símbolos de fertilidad, sacrificio y paz. Las formaciones militares se organizaron en grupos operativos conjuntos, orientados a operaciones terrestres, marítimas, defensa antimisiles, logística, información y ataque estratégico.
La presencia internacional incluyó al presidente ruso Vladímir Putin, el líder norcoreano Kim Jong Un, el presidente iraní Masoud Pezeshkian, el primer ministro paquistaní Shehbaz Sharif y el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien expresó su admiración por la historia de China y agradeció la cooperación bilateral. También asistieron jefes de Estado de Mongolia, Uzbekistán, Bielorrusia, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán, Kazajistán, Azerbaiyán, Armenia, Camboya, Vietnam, Laos, Nepal, Maldivas, República del Congo, Zimbabue y Myanmar.
Por Venezuela, el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, que formó parte de la delegación oficial. La participación de líderes latinoamericanos y asiáticos reforzó el carácter multilateral del evento, y proyectó una imagen de unidad frente a los desafíos globales.
El desfile tuvo una duración aproximada de 70 minutos y fue un momento de reflexión sobre el papel de China en la derrota del fascismo. La conmemoración recordó la rendición formal de Japón el 2 de septiembre de 1945, que puso fin a la agresión prolongada en Asia.
La guerra, que antecedió al inicio formal de la Segunda Guerra Mundial en Occidente, dejó un saldo de aproximadamente 20 millones de víctimas chinas, en su mayoría civiles. La resistencia fue liderada por el Kuomintang y el Partido Comunista Chino, que conformaron un frente unido ante la invasión.
La jornada reafirmó el legado histórico del pueblo chino y su capacidad de defensa nacional, en una puesta en escena que combinó memoria, estrategia y proyección internacional.
Fuente: Medios Internacionales
VTV/LM/EB/DB/