Cepa más agresiva causante de la COVID-19 circula por Egipto

Además poco antes del comienzo de la estación invernal, 23 millones de estudiantes regresaron a las aulas luego de un cierre de colegios y universidades que duró más de seis meses.

De acuerdo con los datos oficiales, unas 114 mil personas resultaron infectadas del inicio del brote en febrero a la fecha, y alrededor de seis mil 500 fallecieron.

El presidente egipcio, Abdel Fattah El-Sisi, instó a los ciudadanos a extremar los cuidados en esta etapa y adelantó que la ruta a seguir para enfrentar la pandemia dependerá del comportamiento de ellos a la hora de acatar las medidas preventivas como el uso de mascarillas fuera del hogar.

En un discurso televisivo esta semana recordó las severas disposiciones adoptadas en marzo, incluido un toque de queda parcial y cuarentenas locales.

Desde el 1 de julio el gobierno decidió reanudar los vuelos internacionales y el turismo, posteriormente autorizó la entrada a la totalidad de sus museos y sitios arqueológicos.

Aunque el uso de barbijos en lugares públicos es obligatorio por decreto desde el 30 de mayo, el hábito no está generalizado lo que constituye un factor de riesgo en el populoso territorio.

Además de los preparativos a fin de encarar la crisis en los centros hospitalarios, Egipto prepara condiciones para las pruebas en humanos de su primera vacuna contra la COVID-19, que requerirá en una fase inicial de 100 voluntarios, reseñó Youm7.