Dos murales en honor a Aquiles Nazoa embellecen las calles de Caracas

Las Fundaciones Misión Cultura y Red de Arte, junto con la Brigada Pinceladas de Artesanos y Artesanas para Aquiles, culminaron el segundo mural en Caracas, del proyecto de “Murales Centenarios: Natalicio de Aquiles Nazoa”, en homenaje al escritor, periodista, humorista, ensayista y poeta venezolano.

A partir del pasado mes de septiembre, en la pared del Patronato de San José de Tarbes, avenida México “se visibilizará el trabajo de las manos artesanas” comenta Julio Oropeza, quien estuvo al frente de este importante proyecto. Resaltó que los artesanos son seres integrales, que crean en más de una forma, recorriendo diversos caminos en constante enriquecimiento artístico.

El primer mural, realizado por la Brigada Pinceladas de Artesanos y Artesanas, ubicado en la esquina del Colimodio, es una pintura alusiva a uno de los escritos del gran poeta Aquiles Nazoa: “La historia de un caballo que era bien bonito”, su boceto fue diseñado por Carolina Jovers, y sirvió de base e impulso para la creación del siguiente mural, donde se muestra a Aquiles asomándose en un trompo, aludiendo sus múltiples menciones de los juguetes tradicionales, cerca de una de sus más icónicas frases: “Creo en los poderes creadores del pueblo”, del poema: “El credo de Aquiles Nazoa”; además de muchas otras ilustraciones que permiten visualizar diferentes objetos referentes a la ciudad de Caracas, como el simbólico tranvía, los encendidos eléctricos, entre otros.

El boceto fue realizado por José Alfredo Escalona, utilizando una técnica caricaturista, posteriormente, los demás integrantes de la Brigada de Artesanos sumaron algunos dibujos, como por ejemplo: una tortuga, la cual, representa otro de los poemas del reconocido escritor, titulado “Buen día, tortuguita”, haciendo del proyecto un “trabajo colectivo” comenta Julio, destacando la participación dinámica, y la convivencia productiva, entre los integrantes de la Brigada.

El mural contiene colores suaves, “efecto conseguido por el difuminado de las pinturas” menciona Julio Oropeza, que le da un aspecto cálido y atrayente que, al instante, atrapó al público que momentáneamente presenciaron la obra, y quienes no pudieron evitar sus gratas expresiones de asombro, y comentarios positivos sobre la pieza artística, refiere nota de prensa de la Fundación Misión Cultura.