Advierten sobre pérdida total de hielo marino en el Ártico en 30 años
Un nuevo informe sobre el estado de la criosfera presenta datos preocupantes sobre los impactos actuales y previstos en las capas de hielo del planeta, aunque ofrece la esperanza de que los daños futuros puedan limitarse mediante reducciones rápidas y bruscas de las emisiones de gases de efecto invernadero.
El estudio titulado ‘Pérdidas crecientes, impactos globales’ es resultado del trabajo de más de 60 científicos especializados.
El reporte alerta de que «la combinación del derretimiento de las capas de hielo polares, la desaparición de los glaciares y el deshielo del permafrost tendrá efectos rápidos, irreversibles y desastrosos para la población de la Tierra».
Los especialistas prevén que la pérdida total del hielo marino de verano en el Ártico es «inevitable» en las condiciones actuales y que esta, incluso con emisiones muy bajas, podría producirse antes de 2050.
Este «diagnóstico terminal» proporcionado por los científicos se suma a otros impactos en la criosfera que ya se han observado en el último año, tales como la primera liberación de metano registrada en un lugar de permafrost.
Según el informe, la disminución de la criosfera tendrá consecuencias sobre todo en regiones alejadas de los polos, especialmente en zonas costeras y comunidades situadas abajo de los glaciares. Se trata de la subida del nivel del mar, el aumento del riesgo de inundaciones, la disminución del suministro de agua y la pérdida total de glaciares fuera de la región polar.
Uno de los autores, Ben Orlove, de la Escuela del Clima de la Universidad de Columbia (EE.UU.), recalcó que las nuevas investigaciones confirman un mayor «riesgo de inundaciones en regiones densamente pobladas, con especial gravedad en Asia».
«El ritmo de retroceso de los glaciares en 2022 fue asombroso, con niveles sin precedentes de derretimiento de los glaciares en los Alpes y los Pirineos, lo que provocó casos de colapso de glaciares y graves pérdidas del ecosistema», lamentó.
Esperanza
Sin embargo, el científico sigue siendo cautelosamente optimista. «Los nuevos trabajos que integran observaciones de campo y modelos demuestran que aún estamos a tiempo de preservar muchos glaciares si pasamos en un futuro muy próximo a escenarios de bajas emisiones», agregó el investigador.
El científico explicó que la criosfera es una de muchas otras regiones del mundo –como los bosques tropicales, arrecifes de coral, zonas costeras y tierras agrícolas y forestales– que exigen una rápida y urgente reducción de las emisiones.
Fuente: RT en español
VTV/JR/CP