Inundaciones en Nigeria dejan más de mil 500 personas afectadas
Una devastadora inundación provocada por intensas lluvias dejó un saldo trágico en la aldea de Kpege, en el estado de Níger, al oeste de Nigeria, donde resultó afectada la vida de al menos 117 personas, mientras que alrededor de 20 permanecen desaparecidas. Según la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR), el fenómeno anegó unas 50 viviendas y arrasó extensas áreas de cultivo, lo que estremeció a más de mil 500 habitantes, de los cuales 200 fueron desplazados.
Ante la magnitud del desastre, la Agencia Nacional de Emergencias de Nigeria (NEMA) desplegó un amplio operativo de búsqueda y rescate, que continúa este viernes. Las autoridades advierten que la cifra de víctimas podría aumentar, ya que aún hay numerosos desaparecidos. La directora de la NEMA, Zubaida Uma, señaló que la prioridad es evacuar y asistir a los damnificados, por lo que se proporcionó alimentos, agua potable, refugios temporales y atención médica. De igual modo, voluntarios de la Cruz Roja de Nigeria participan activamente en las labores de auxilio.
El Foro de Gobernadores de Nigeria manifestó su apoyo a la comunidad afectada, además de expresar su solidaridad con el Gobierno estatal. En un comunicado, los mandatarios calificaron el desastre como “devastador” y lamentaron las pérdidas humanas y materiales sufridas. En este contexto, hicieron un llamado para acelerar las acciones de ayuda y reconstrucción en las zonas golpeadas por el fenómeno climático.
Las inundaciones en Nigeria se han vuelto un problema recurrente, exacerbado por las lluvias torrenciales, debido al impacto del cambio climático. Datos de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) revelan que, solo en 2024, más de 640 mil personas fueron desplazadas por este fenómeno y al menos 269 fallecieron en distintas regiones del país.
Las cifras reflejan la urgencia de implementar estrategias efectivas de mitigación y adaptación ante estos desastres. En años recientes, Nigeria experimentó episodios catastróficos de inundaciones, con un saldo de 600 víctimas en 2022 y 40 fallecidos en 2020. Expertos subrayan la necesidad de mejorar los sistemas de drenaje y fortalecer la respuesta ante emergencias para reducir el impacto de futuros eventos climáticos extremos.
Fuente: Telesur
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