Madre lactante fue separada de su hija y deportada a Cuba
Heydi Sánchez Tejeda, una madre cubana, fue deportada a su país debido a una orden de deportación final que tenía desde 2019. A pesar de haber intentado reabrir su caso y de tener una petición familiar activa, fue detenida durante una cita rutinaria con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y deportada sin previo aviso.
Su deportación ha sido criticada por su abrupta ejecución y la falta de compasión hacia la situación familiar de Sánchez, quien dejó a su hija lactante en Estados Unidos. La abuela paterna de la niña, a cargo de su cuidado mientras el papá trabaja, aseguró que la pequeña llama a su madre y se pone intranquila a la hora de dormir.
«Desde que nació siempre la ha tenido, nunca la deja para nada. A la hora de dormir se pone muy intranquila, llamándola, pidiendo estar con ella», transmitió la abuela.
La abogada de Sánchez, Claudia Cañizares, mencionó que trabajan e intentan obtener un perdón a través de su esposo, ciudadano estadounidense, y que también se está considerando presentar una solicitud de parole humanitario, aunque reconoce que este proceso es complicado y puede tardar varios años.
Hasta hoy, Heidy Sánchez Tejeda permanece en Cuba, alejada de su hija menor y su esposo, mientras organizaciones de derechos civiles, líderes comunitarios y representantes del Congreso presionan por una respuesta rápida de la Casa Blanca.
La situación, lejos de ser un caso aislado, forma parte de la política migratoria de Trump, que ha sido ampliamente criticada por su enfoque en la criminalización de la migración y la separación de familias migrantes.
Bajo el mandato de Trump, la crisis migratoria ha afectado a miles de familias, particularmente a aquellas de Cuba, Venezuela, y otros países latinoamericanos. La política de «tolerancia cero» del gobierno estadounidense ha llevado a la separación de miles de niños de sus padres, sin importar la legalidad de la estadía de las familias en el país.
Fuente: Medios Internacionales
VTV/DR/CP